Uno de los sueños de la mayoría de las personas es poder cambiar la distribución de la vivienda a su gusto. Hace años era prácticamente impensable debido a su alto coste; sin embargo, hoy en día, los tabiques y trasdosados de yeso han cambiado el paradigma de la construcción siendo una excelente opción si estáis pensando en modificar las estancias de vuestra casa, ya que son más económicos, limpios, ligeros y reducen significativamente los tiempos de la reforma.
Es tan fuerte su irrupción en el sector que, aunque tenemos otros artículos del blog donde comentamos particularidades de los tabiques y trasdosados de yeso, queremos ayudaros a conocer al detalle todas las características y posibilidades que os ofrecen, así como los distintos tipos que existen, sus ventajas y aplicaciones.
Tipos de tabiques
Existes distintos tipos de tabiques, cada uno con funciones específicas dependiendo del uso y las necesidades del espacio. En un edificio, podemos distinguir tabiques que no son estructurales. Son los conocidos como tabiques interiores y existen 3 tipos:
- Tabiques de separación: como su propio nombre indica, son los encargados de dividir áreas principales dentro de un edificio. Se pueden instalar con material aislante, colocándolo en el interior de la instalación (entre las placas), de manera que queda completamente invisible para quienes se encuentren en la estancia. Normalmente se utilizan en lugares donde se necesita privacidad, por ejemplo, entre diferentes viviendas de un mismo edificio, habitaciones o zonas comunes.
- Tabiques de distribución: estos son los más ligeros y se usan para organizar espacios internos, creando así nuevas estancias dentro de una vivienda sin requerimientos estrictos de aislamiento.
- Tabique trasdosado: se instala sobre paredes de ladrillo ya existentes para mejorar el aislamiento térmico y acústico o para corregir irregularidades sin necesidad de realizar grandes obras. Al igual que en tabique de separación, puede incluir una capa de material aislante entre la pared original y el nuevo revestimiento. Hablaremos de estos sistemas en el siguiente punto.
Tipos de trasdosados
Antes de explicar los principales tipos de trasdosado, es importante aclarar, aunque ya lo hemos mencionado en nuestro artículo donde explicamos qué es un trasdosado, que este procedimiento consiste en cubrir un muro de ladrillos tradicional con placas de yeso laminado, con el objetivo de mejorar su estética, aislamiento o ambas.
Es decir, un trasdosado se trata de un tabique que se instala sobre un muro y existen los siguientes tipos:
- Trasdosados directos: este tipo de trasdosado se fija directamente sobre la pared existente con pasta de agarre o adhesivo, utilizando las placas de yeso laminado. Aunque su capacidad de aislamiento es más limitada que los tipos de trasdosados que veremos a continuación, es ideal para ahorrar espacio. Al ser la tipología de tabique que menos material necesita por estar reposado sobre un muro ya hecho, se convierte también en la opción más económica que puedes elegir.
- Trasdosados semidirectos: también conocidos como omega, en este caso las placas de yeso laminado se atortillan sobre una estructura de perfiles omega, que puede incluir elementos de aislamiento entre la pared y la placa. Además, ofrece un mejor rendimiento térmico y acústico en comparación con el directo.
- Trasdosados autoportantes: trata de una estructura independiente de acero galvanizado, diseñada para no apoyarse directamente sobre la pared existente. Utiliza perfiles en U, lo que permite la incorporación de una mayor cantidad de material aislante en su interior.
De este modo, según tus necesidades de aislamiento, de espacio disponible y de facilidad de instalación podrás escoger entre uno de estos tres tipos de trasdosado.
Ventajas de los tabiques de yeso laminado
Como ya hemos adelantado, las ventajas del yeso son innumerables. Aquí desglosamos los puntos fuertes a tener en cuenta a la hora de planificar una instalación:
- Rapidez en la instalación: Al tratarse de un sistema de obra seca, su montaje es mucho más rápido que el de los tabiques tradicionales de ladrillo, además de generar menos polvo y ser más ligero.
- Versatilidad: El yeso laminado es un material que se adapta fácilmente a diferentes diseños y espacios, lo que permite su uso en prácticamente cualquier lugar. Además, facilita la instalación de otros elementos, como cables o tuberías, sin necesidad de rozas.
- Resistencia a la humedad: Existen versiones del yeso laminado especialmente diseñadas para resistir entornos húmedos, lo que lo convierte en una excelente opción para baños y cocinas.
- Protección contra el fuego: Al igual que contra la humedad, estos sistemas también ofrecen opciones con una alta resistencia al fuego, cumpliendo con las normativas de seguridad exigidas en muchos proyectos de construcción.
- Estética: Los tabiques de yeso laminado permiten esconder cables y otros elementos técnicos, dejando un acabado liso y listo para pintar, lo que mejora la estética general de los espacios.
- Limpieza y menor generación de escombros: Al ser un sistema limpio que no produce escombros en exceso, resulta ideal para trabajos en interiores donde se busca minimizar el impacto de la obra en el entorno.
- Resistencia y estabilidad: A pesar de su ligereza, los paneles de yeso laminado tienen una gran resistencia frente a movimientos y vibraciones, lo que los convierte en una solución durable.
Después de toda esta información, desde PREFAES esperamos y deseamos que hayas visto solucionadas tus inquietudes. No dudes en ponerte en contacto con nosotros si necesitas asesoramiento o presupuesto para llevar a cabo la instalación de cualquier tipo tabique o trasdosado.
